La danza clásica para moldear y estilizar tu figura.
Cuerpo de ballet en la revista Vogue España por Verónica Román (13.09. 2012).
«Me gusta el ballet porque puedes apreciar la belleza del cuerpo humano. Es la misma sensación que me inspira la moda. La danza clásica es muy buena para moldear la figura. Es parecido a practicar yoga porque también tienes que mantener una posición. He hecho un montón de yoga a lo largo de mi vida pero lo he cambiado por el ballet, quizá porque adoro la música de piano. Cuando lo practico me imagino en una escuela rusa de danza, y me encanta. Si ahora pudiera elegir, además de dedicarme a la moda sería bailarina». Así de rotunda y convincente se muestra Carine Roitfeld, directora de CR Fashion-Book -y ex directora de Vogue París
Carine está estupenda, tiene una figura envidiable y afirma que todo se lo debe al ballet clásico, técnica de moda entre modelos y celebrities que apuestan por cambiar las agotadoras y machaconas clases en el gym por las delicadas y elegantes poses de la danza. Coco Rocha es otra de las incondicionales del ballet, igual que Sarah Jessica Parker, que mantiene su estilizada figura gracias a un duro entrenamiento diario. O Dita Von Teese, que ha construido su carrera gracias al rigor y sacrificio que aprendió de la danza cuando sólo era una niña.
«Desde hace unos años muchas mujeres vienen a aprender ballet clásico como hobby. Cambian las clases de pilates o ejercicios de spinning por la danza. No hace falta tener experiencia, cualquiera puede hacerlo y los beneficios se notan enseguida», explica Pilar Duque, directora de la Escuela de Danza Duque, que tiene clases de iniciación para adultos. Igual que el recién inaugurado Centro de Danza Maria Rosa, al que acuden niños y adultos para mantenerse en forma y aprender ballet.
«Es una técnica mucho más respetuosa para el cuerpo. Se trabajan todos los músculos del cuerpo, ayuda mucho con los problemas cervicales y estiliza la figura. Además se aprende de una forma muy agradable», argumenta Stefania Angelo, directora de SpazioDanza, otra de las academias que cuenta con varias clases de ballet clásico para adultos sin experiencia.
Rendirse ante las suaves notas de un piano mientras una firme y elegante voz va dictando órdenes en un perfecto francés. Este evocador universo hiper estético de barras, espejos, puntas, tules en tonos pastel y tirantes moños de bailarina también ha fascinado y fascina a los grandes de la moda. Hablamos de Rodarte, ya que las hermanas Mulleavy crearon el vestuario de Cisne Negro, la película sobre ballet de Darren Aranofsky que protagonizaron Natalie Portman y Mila Kunis. Y hace unos meses las diseñadoras repitieron, firmando también los trajes para la última coreografía de Benjamin Millepied, coreógrafo de Cisne Negro y marido de Natalie Portman.
Y es que parece que el ballet es el nuevo refugio de los diseñadores, el lugar donde tomarse un respiro de la vorágine de las pasarelas para crear delicadísimas piezas destinadas a volar sobre el cuerpo de baile. Igual que Rodarte, Valentino también anunció a principios de este verano que crearía el vestuario para tres piezas del New York City Ballet, obra que se estrenará el próximo 20 de septiembre con motivo de la gala de otoño, que precisamente rendirá homenaje al genial creador italiano por su 50 aniversario.
El ballet te pone en forma por Vogue España