Si has escuchado que los músculos tienen memoria, es cierto. Al parecer, los músculos que han llegado a un buen entrenamiento y desarrollo, pueden volver a esa fase mucho más fácilmente que aquellos músculos que siempre han sido sedentarios. Otro de los beneficios de hacer ejercicio regularmente y desde temprana edad.
Si tienes algún amigo o amiga que siempre ha hecho ejercicio, te darás cuenta de que aunque deje de hacerlo con regularidad, una vez que retoma su rutina, parece volver a estar en forma y recobrar sus músculos más rápidamente que alguien que siempre ha sido sedentario. Puede que tú mismo(a) siempre hayas hecho ejercicio y te das cuenta de que aunque tengas periodos de receso, cuando vuelves al gimnasio o a practicar el deporte que más te gusta, tu cuerpo se acostumbra de nuevo al ritmo, mucho más rápido de lo que pensaste. Y es que al parecer, a los músculos no se les olvidan su época dorada. Así como lo lees: los músculos ‘recuerdan’ lo que fueron y pueden volver a tomar la forma de sus días de gloria.
Esta teoría que tal vez has escuchado por ahí, no es un mito. Existe evidencia científica que demuestra que en efecto, los músculos sí tienen memoria. Te preguntarás ¿cómo es posible que un músculo ‘recuerde’? La respuesta de los científicos de la Universidad de Oslo en Noruega, es la siguiente: La memoria de los músculos se guarda como el ADN que contiene un núcleo, el cual se multiplica cada vez que un músculo es ejercitado. Para ponerlo en palabras más sencillas: es como si de tanto ejercitarse, el músculo desarrollara otros núcleos en sus células que se despiertan aunque hayas pasado mucho tiempo sin hacer ejercicio normalmente, y vuelven a activarse. Esos núcleos son como la ‘huella’ que ha dejado el ejercicio en los músculos.
Los investigadores de la Universidad de Oslo explicaron también que las células de los músculos son bastante grandes. Por esa razón, se necesita más de un núcleo para poder proporcionar los modelos de ADN que fabrican las proteínas para darle su fuerza a un músculo. Estos núcleos, a diferencia de lo que se creía anteriormente, no mueren cuando un músculo deja de ejercitarse. Es decir, no se atrofian.
No se sabe si estos núcleos que le permiten al músculo volver a recobrar su fuerza rápidamente duran para siempre, pero se sabe que sí tienen un efecto a largo plazo. Es por eso que los músculos de las personas que han hecho ejercicio responden más rápidamente al entrenamiento. De ahí que ahora se ha creado una polémica alrededor de la memoria muscular: ¿Por cuánto tiempo se puede suspender a los atletas que han usado esteroides para aumentar su masa muscular? Si el efecto de la fuerza en los músculos se mantiene aunque no hagan ejercicio, las personas que usan esteroides pueden tener una ventaja a su favor para siempre.
Aunque ‘siempre’ es un término bastante relativo. Todos, queramos o no, a medida que pasa el tiempo y envejecemos, vamos perdiendo masa muscular. Por eso, lo ideal es hacer ejercicio en la juventud para poder tener unos músculos más firmes cuando seamos adultos mayores. ¿No es otra buena razón para hacer ejercicio? Yo creo que sí.
Desde ahora, si eres joven, incorpora el ejercicio como parte de tu rutina. Si tienes hijos, incúlcales la importancia de la actividad física. Si hacías ejercicio antes y dejaste de hacerlo por un tiempo, ¡retómalo! De seguro tus músculos responderán muy bien. Si nunca has hecho ejercicio, ¿qué esperas? ¡Nunca es tarde para empezar! Fuente vidaysalud.com