Las bailarinas de Degas tan dulces y refinadas no reflejan la verdadera historia del pintor francés Edgar Degas, cargada de oscuridad y soledad en Paris.
Hilaire-Germain-Edgar de Gas, conocido como Edgar Degas nació en Paris en 1834. Fue pintor, escultor y fotógrafo, ramas artísticas que combinaba y con las que conseguía retroalimentarse para hacer creaciones impresionistas. Poco amigo del dinero y del lucro personal nunca fue una persona de muchas amistades, situación que se agravó con el paso del tiempo.
El conocidísimo pintor francés tuvo muchos problemas, entre ellos destacó la ceguera, que se acrecentó pasado su 50 cumpleaños. En su origen, Degas pintaba casi en exclusiva al óleo, pero las dificultades de la vista le obligaron a cambiar esta técnica por una más seca, pasando así a las pinturas pastel. Con este tipo de material, Degas podía hacer trazos más finos mientras acercaba su cara lo máximo posible al soporte en el que estuviera trabajando.
Esta enfermedad sumada a la falta de habilidades sociales, le convirtió en una persona aislada. Cada vez se encerraba más en su estudio, pasando semanas enteras sin salir, ni mantener comunicación con nadie. Cada vez que alguien se le acercaba era capaz de gritar e insultar a quien se atreviera a entrar en “sus dominios”. Cuando caminaba por la calle también insultaba, especialmente a las personas judías. Además alardeaba de su falta de seres cercanos, e insistía que los buenos artistas no deben tener amigos ni relación con sus familiares, porque “la única aliada del artista es la soledad”.
Degas no vendía sus obras al no tener contacto con nadie y no gustarle el hecho de “mercadear” con el arte, por lo que no recibía dinero alguno. Las deudas fueron apoderándose de su vida, tuvo que ser juzgado y finalmente desahuciado de su casa. Sus últimos años de vida los pasó solo, ciego y sin rumbo alguno por las calles de París. En 1917 murió sin más descendiente que las maravillosas obras que cuelgan de las paredes de gran cantidad de museos y galerías.
¿Conocíais estas facetas de Edgar Degas? Parece mentira que detras de los delicados y suaves trazos de las alegres bailarinas se esconda toda esta tragica y oscura vida, ¿no? ¿Qué os ha parecido? Fuente totenart.com