Maison Lemarié es una casa francesa especializada en los bordados con plumas y en la confección de las camelias, símbolo de Chanel.
Fundada en 1880 por Palmyre Coyette, abuela de Andre Lemarie, cuando no existía dama sin sombrero ni sombrero sin adorno de plumas, este taller logró reinar durante décadas en toda Francia como el maestro en la confección y manipulación de plumas para aderezos y prendas de vestir.
En sus primeras décadas de andadura, su trabajo estuvo focalizado en la distribución para mayoristas y grandes almacenes y la casa obtendría el 50% de sus beneficios de las exportaciones. Sin embargo, en 1946 Andre Lemarie se uniría a sus padres en la dirección del negocio familiar, y dirigiría el timón hacia los seductores mares de la Alta Costura: Christian Dior, Cristóbal Balenciaga, Nina Ricci… fueron muchos los que apoyaron sus magníficas construcciones en sus preciosos tejidos.

En 1900 más de 300 expertos artesanos de las plumas llegaron a París. En 1960, no eran más de 50.
En su deseo por hacer perdurar este exquisito trabajo, en 1996 Chanel adquirió los talleres Lemarie.
Hoy, Lemarie es la única casa especializada en los bordados con plumas que permanece en Francia uniendo lujo y respeto al medio ambiente, ya que desde que las aves del paraíso y las garcetas son especies protegidas, la casa recibe plumas importadas de Sudáfrica de forma controlada para someterlas a un proceso de teñido y curtido que las metamorfosea en auténticos caprichos.
Pero no son sólo plumas los materiales que trabaja la Maison. Aparte de contar con un excepcional surtido de plumas de avestruz, gallo, cisne, emú, ganso, pavo y aves exóticas, Lemarie produce las flores más hermosas y es que en boca del mismo Karl Lagerfeld, Monsieur Lemarie es sin duda el Rey de las Camelias. Según el káiser, los artesanos de la casa, pues no olvidemos que cada flor se confecciona a mano y requiere de gran destreza tanto en el uso de las herramientas como en la manipulación de los materiales, tienen la capacidad de hacer de un pedazo de tela todo un objeto de deseo.
La camelia fue presentada por primera vez por Mademoiselle Coco Chanel en los años 60 y desde entonces ha sido reeditada en seda, piel, raso, organza, plástico e incluso cartón. En diferentes materiales, colores y apariencias, cada año Lemarie produce para Chanel alrededor de 20.000 flores cada año.
Lo que muchos no saben es que además, Lemarie es un auténtico atelier de confección de fruncidos, volantes y encaje que domina las más intrincadas técnicas y pone las más bellas creaciones a disposición de las principales casas de Alta Costura: Dior, Lacroix, Chanel, Givenchy, Valentino, Dolce & Gabbana o Armani entre otros, se sirven de su materia prima para obtener el más perfecto de los productos.
El sueño de la Alta Costura visto desde el origen de su creación. ©Lemarié.


