Llegado el invierno no deberíamos empezar a hacer planes sin que nuestra piel continúe en el mejor estado. Hay muchas cosas que seguramente desconozcas y que puede que estés pasando por alto, por eso te animamos a leer este artículo hasta el final, donde encontrarás información muy interesante sobre los siguientes puntos:
- El invierno y nuestra piel.
- Guía con los mejores cuidados de la piel en invierno.
El invierno y nuestra piel. Con la llegada del frío, aparecen muchos riesgos para nuestra piel que deberíamos tener en cuenta. Y es que muchas veces caemos en el error de pensar que es en verano cuando debemos concentrar todos los cuidados y precauciones.
La llegada brusca del frio, los cambios bruscos de temperatura al entrar y salir de casa o la oficina y la contaminación hacen acto de presencia. Aunque estos problemas nos afectan a todos, las mujeres y quienes tienen la piel clara deben prestar una especial atención. Es a quienes tienen este tipo de dermis a quienes con más ímpetu animamos a seguir esta guía con cuidados de la piel en invierno
¿Cuál es la zona del rostro más protegida ante estos factores? Pues ni más ni menos que la famosa zona T, y es que la mayor concentración de grasa le proporciona a frente, nariz y mentón una protección extra. Por el contrario, la zona de las mejillas y la zona de delante de las orejas cuentan con una piel mucho más fina con tendencia a secarse.
¿Los principales daños? El exceso de sequedad, la aceleración del envejecimiento y la cuperosis (capilares dilatados) son las principales imperfecciones que aparecerán si no garantizas los correctos cuidados de la piel en invierno.
Los mejores cuidados de la piel en invierno
Los labios. Empezamos por uno de los protagonistas de esta época del año, pues suele ser una parte que la gente acostumbra a cuidar. Y es que con la bajada de las temperaturas, esta es una de las primeras zonas en enviarnos una señal de socorro. La finísima capa de piel de los labios hace que sean especialmente vulnerables, siendo muy común que en invierno se sequen y se agrieten, pudiendo llegar incluso a sangrar. La solución consiste en aplicar un bálsamo labial hidratante o vaselina.
La hidratación. Es el pilar central de los cuidados de la piel en invierno. Debemos preocuparnos de mantener correctamente hidratado todo el cuerpo, prestándole especial atención a la zona de la cara y las manos. Suelen ser las partes que más tiempo de exposición al frio sufren. Aun así, no debemos descuidar brazos, piernas, codos ni rodillas.
Cuidado con el agua caliente. Aunque resulta casi imposible no recurrir al agua bien caliente cuando las temperaturas bajas, debemos ser conscientes de que abusar de los baños a elevada temperatura acaba resultando dañino.
La piel puede acabar notando el resentimiento y la rojez, además de no ser bueno para la circulación sanguínea. Lo mejor es realizar un pequeño sacrificio, y es terminar cada ducha con un chorro de agua fría, haciendo especial hincapié en las piernas. Son unos segundos de terror, pero a la larga tu piel te estará muy agradecida.
La limpieza del rostro es clave. Lo ideal es lavar nuestra cara dos veces al día. Por la mañana con la finalidad de eliminar células muertas, sudor y residuos del día anterior; y por la noche, para arrastrar el maquillaje y los residuos contaminantes que se acumulan a lo largo de nuestros días.
Lo ideal es usar un jabón suave, neutro y no abrasivo. Además de eliminar todas estas impurezas, ayudara a que la piel se muestre más receptiva a la hora de aplicar productos cosméticos. Fuente Belletica.